jueves, 9 de enero de 2014

Propósitos del pasado.


-¡Esta es la última caja! -Grite desde la ventana del balcón, sujetándola entre mis brazos. Comencé a andar con ella hasta llegar a la puerta. Sin embargo, justo antes de llegar a tocar el pomo, di un traspiés con la mesilla y ambos caímos al suelo.
La caja cayó al suelo y se abrió dejando salir un montón de cartas y fotos mías. La mesilla se rompió y por suerte yo solo me llevé un gran golpe contra el suelo, aunque notaba algo de sangre en mi codo.
Me acerqué a la caja y comencé a meterlo todo rápidamente hasta que encontré una foto mía con una vieja amiga mía de la infancia. Quedé ciertamente asombrada al ver que la recordaba tal y como estaba aquel día, que íbamos juntas en bicicleta por el parque. Recuerdo su largo y castaño pelo y sus converse que tanto me gustaban. Seguí observando la foto mientras intentaba buscar otra.
La siguiente que encontré estaba con otro de mis amigos de la infancia, la recuerdo como si fuese ayer. Recuerdo sus redondas gafas y su pelo tan oscuro. Recuerdo que aquel día estábamos comiendo palomitas en la parada del autobús hablando del cole y haciéndonos fotos con el móvil. Detrás de cada foto encontré escritos míos, eran deseos y propósitos para cada año. La mayoría eran simplemente vivir más recuerdos como aquellos con mis amigos, y otros más complejos como viajar por todo el mundo o convertirme en estrella del pop.
Lo divertido de estos deseos y propósitos no era que muchos no los halla podido cumplir, sino la imaginación y positividad con la que imaginaba una fantasía en mi cabeza.
Me di cuenta de que deseamos cosas que pensamos que solo las podemos cumplir al crecer y de tanto esperar a hacerlo, las acabamos olvidando. y acabamos deseando otras cosas mas simples que pensamos que son más fáciles de cumplir.
Al meter todas las fotos, cartas y dibujos de nuevo en la caja, la levanté y de ella cayó una última foto. En esta salíamos mi madre y yo, estábamos sonriendo y ella me abrazaba. Al darle la vuelta vi un escrito aunque no era mi letra, sino la suya.
decía así: ``si alguien te dice, piensa antes de actuar, no lo hagas. Si piensas siempre todos, nunca acabas actuando. Te quiere, mamá´´

-Claudia

1 comentario:

C.S dijo...

Es una reflexión muy optimista. Daba gusto ver a alguien escribir de forma tan positiva sobre lo que significa, crecer, madurar y también tener deseos que puedan cumplirse.