miércoles, 13 de abril de 2016

Origen

No creo que haya una vuelta atrás para esto. Si saltamos, el vacío nos consumirá y lo que haya allí abajo, si es que hay algo, nos devorará.
 
-¿No quieres hacerlo?
-Tenemos que hacerlo, hay que saltar.
Lentamente, ambos adelantaron sus pies hasta el borde, dejándolos justo ahí, a un milímetro de la caída. ¿Cambiarían verdaderamente las cosas? La idea de no volverse a ver era casi tan abrumadora como la incertidumbre, la esperanza de que aquella acción fuera a resolver las dudas y responder a las preguntas. Que lo que los aguardaba podría darles una opción que no fuera morir aquí, donde parecía que ya no quedaba nada.
-No me sueltes.
Y sin embargo, una vez los cuerpos rasgaron el aire vencidos por la gravedad, sus manos se soltaron mientras sus cuerpos caían a distinta velocidad. Antes de llegar abajo, ella miró hacia arriba y, un segundo antes de todo, sus ojos se encontraron antes de desaparecer.

1 comentario:

Unknown dijo...

Dios...me ha encantado!!!!